Ayer el
medio de comunicación RTV Paraguay hizo eco de una denuncia de dos jóvenes
encarnacenas que alegan haber sido maltratadas y explotadas laboralmente por
parte del patronal de la heladería Los Dos Chinos.
Teodora
Ojeda trabajaba en la sucursal Mcal. Estigarribia casi Constitución Nacional hace 7 años, junto con Dahiana Sotelo quien estuvo aproximadamente 6 meses, la empresa es del señor
Freddy Joffre Rojas.
Relatan
que el pasado 9 de febrero, siendo casi las 18:00 hs, la señora Lucrecia Yanina Joffre se presentó en la heladería exigiendo el faltante de productos
“ante este reclamo le devolvimos lo que solicitaba, pero nos perjudicó también”
señala una de las afectadas. En este sentido, las jóvenes comunicaron lo
acontecido al señor Fredy Joffre Rojas, que llamó la atención a la señora
Lucrecia.
Ante
esto, la señora Lucrecia vuelve rápidamente hasta el local, donde reclamó a las
jóvenes la queja realizada al señor Freddy, “con insultos y palabras
agraviantes hacía nuestras personas, a tal punto que me tiró un termo con agua,
agrediéndome físicamente y dañándonos psicológicamente” dijo Dahiana Sotelo.
“La actitud
de la señora Lucrecia nos causa temor, porque ella realiza este tipo de actos
con todos los empleados y empleadas que están bajo su dependencia. No solo con
nosotras sino con varias jóvenes a quienes echó sin ninguna justificación,
diciéndoles que no servían para nada”, alega Sotelo.
Señaló que decidieron denunciar a
la prensa para que se sepa como esclaviza esta empresa a los jóvenes que van a
trabajar ahí. “No tenemos días libres, trabajamos de lunes a lunes de 10
de la mañana a 8 de la noche a veces de 10 de la mañana a 1 de la
madrugada, no tenemos sueldo mínimo, IPS, navidad, año nuevo, feriado y con
todo eso se nos trata mal otra vez” indicó.
Dahiana dice que se animaron a denunciar porque ya estaban cansadas de los maltratos de la señora Lucrecia, hija del señor Freddy. Varios jóvenes fueron víctimas de sus maltratos, de estirones, empujones y gritos. Incluso recibieron amenazas por eso tienen miedo a denunciar.